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El Ayuntamiento de Langreo y Hunosa preparan en el valle del Candín una de las mayores áreas industriales de las Cuencas, un gran zona empresarial que contará con unos 250.000 metros cuadrados. Langreo prepara la ampliación del área empresarial de La Moral, mientras que Hunosa presentará en breve a los ayuntamientos de Siero y Langreo el estudio de detalle de los polígonos de Mosquitera I y II. Estas tres nuevas zonas industriales cuentan con una superficie conjunta de más de 107.000 metros cuadrados, que se unirán a los polígonos ya existentes: Valnalón y La Moral.

Las nuevas áreas industriales que formarán el gran polígono del valle del río Candín se asentarán sobre antiguas instalaciones mineras. Hunosa ultima el estudio de detalle de las zonas de Mosquitera I y II, en Siero y Langreo, respectivamente. Mosquitera I contará con una superficie de 39.738 metros cuadrados. De tamaño similar será Mosquitera II, con 38.591 metros cuadrados. Ambos espacios se encuentran enmarcados dentro del plan territorial de Hunosa, el programa de uso de suelo para fines industriales que la compañía pública lleva desarrollando desde 2007. Únicamente uno de estos espacios está en obras: el polígono de El Cadavíu, en el valle del Samuño, en Langreo. El tercer polígono de nueva creación que se prevé para el valle del Candín es el de La Moral II. Los técnicos municipales se encuentran redactando el proyecto, que incluye la urbanización de 29.238 metros cuadrados de terrenos que se unirán a los 83.000 de La Moral I (de ellos, sólo 32.000 utilizables). El Ayuntamiento de Langreo compró a finales de 2008 el suelo a Hunosa, por un total de 588.000 euros, para desarrollar el proyecto. Esta área industrial enlazaría el actual polígono con el pozo Candín y con el polígono de Valnalón, que, excluyendo la zona del semillero de empresas y de compañías tecnológicas, cuenta con una superficie de unos 55.000 metros cuadrados de uso industrial.

Uno de los principales problemas con los que cuenta esta zona, el valle del río Candín, son sus deficientes accesos para vehículos pesados. Durante los últimos años, el Ayuntamiento de Langreo insistió en la necesidad de construir una carretera que vertebrase el valle y le otorgase unos accesos adecuados, sobre todo teniendo en cuenta la gran reserva de suelo empresarial de la zona. El pasado mes de diciembre, la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio e Infraestructuras presentó un proyecto para otorgar mejores comunicaciones al valle.

El Principado intervendrá, con 20 millones de euros procedentes de los fondos mineros, en un tramo de 5,2 kilómetros. Las dos actuaciones principales que recoge el proyecto de acondicionamiento de esta vía serán la ejecución de una circunvalación en Tuilla (que discurrirá por las inmediaciones de la zona del campo de fútbol) y un túnel de 330 metros a los pies de Carbayín Alto. Las obras de los accesos a los polígonos del valle del Candín absorberán la mayor parte de los 20,9 millones que quedan por repartir de los fondos mineros de 2008 y 2009.

Este mes de febrero, además, Hunosa encargó la redacción de un estudio de detalle para emprender la reindustrialización del pozo Pumarabule, en Siero. La ordenación de estos terrenos y la construcción de un área industrial se encuentran, al igual que en el caso de los dos espacios del pozo Mosquitera, incluidos en el plan territorial de Hunosa. En Pumarabule la tramitación del polígono va más retrasada porque tras el cierre de la explotación, en 2005, tuvieron que realizarse en la parcela una serie de obras de seguridad. En total, el plan territorial pretende reaprovechar más de 800.000 metros cuadrados de antiguos pozos y lavaderos.